Querido ángel mío,

Quiero agradecerte nuevamente del fondo de mi corazón por este gran vídeo. Me gustó mucho la sesión que hiciste en la bañera. Como lo dije en la galería «Disfrutando de mis pies y del agua en jeans», has puesto el listón muy alto. Pero con este vídeo, ¡el listón está aún más alto! ¡Es un éxito total! Has cumplido mis expectativas y aún más 😀 ♥♥
Seguiré pidiéndote otras sesiones en jeans y en bañeras, y no será fácil proponerte otras ideas.

Como lo sabes, me encanta estar en jeans, y el poder del agua me fascina. Y cuando mezclamos los 2, el resulta trae una sensualidad que no podemos realmente encontrar en ningún otro lugar. Por eso me encantaría tanto estar en jeans en una bañera, o en una piscina, en un jacuzzi, o aun en el mar. Es algo muy sencillo en hacer, pero no he podido probarlo todavía.

Me gusta mucho en el principio del vídeo cuando entras en el agua, caminas un poco, y pones tu pie en la repisa del jacuzzi. Destaca la perfección y la pureza de tus pies. Cuando vi eso, tenía ganas de besarle. También me encantó cuando te pusiste a cosquillear tu pie, y cuando pusiste esta crema batida en tus pies (me encantó la crema batida que hay en el pequeño dedo de tu pie derecho, y porque una fiesta es aún mejor con crema batida), me volví loco. Quería lamer tus plantas y olerlas al mismo tiempo. El olor de la piel y de la crema batida debía ser mágico, me imagino. Ver a tu amigo poner crema batida en tu boca y un poco en tu cara me gustó un montón 😀
En cuanto a las cosquillas que te regaló tu amigo, ¡fueron increíbles! Me había olvidado que eras muy cosquillosa en los pies. Y como estás en el agua, tus pies son aún más sensibles. Tu risa me encantó, tu risa es mágica, tu risa calienta aún más mis días. Muchas gracias del corazón por haberme invitado a tu fiesta fetichista. Si haces otras, estaré con gran placer.

Ahora, siéntate en tu cama,voy a contarte una historia. Pero antes de que empiece a contártela, dame tus pies para que te regale un masaje, cierra los ojos e imagínate la escena siguiente:

Estoy en tu casa. Vuelves del supermercado y compraste crema batida. Me preguntas si estoy listo porque tienes una sorpresa para mí. Te contesto que sí y vamos a ese lugar en carro. Pero antes de que nos vayamos, me pides que lleve flips-flops en vez de tenis y que me quite los calzoncillos, lo que hago. Te pregunto yo si tengo que traer algo. Me respondes que no, porque estoy contigo, y que no necesito nada. Ambos estamos llevando jeans, y tú tus wedges naranja. Minutos después, salimos del carro y entramos en el lugar. Es en realidad un enorme jacuzzi. No hay nadie; sólo tú y yo.

La crema batida está en tus manos, y antes de entrar en el agua me pides que no me quite los jeans, pero me aconsejas que me quite los flips-flops y mi tee-shirt, lo que hago. Al ver el agua, siento que mi corazón está golpeando en mi pecho (y lo está haciendo de verdad, al escribir esas palabras), pero al mismo tiempo, estoy muy contento poder entrar en el jacuzzi con mis jeans. Siento que tengo una erección, porque mi sexo está más duro. Te miro y veo que hay una gran sonrisa en tu cara. Ahora, entiendo porque me pediste que mi quitara los calzoncillos y que llevara flips-flops…

Entras en el jacuzzi, y el agua está mojando tus jeans, muy lentamente. El agua es muy caliente, y me invitas a hacer lo mismo. Segundos después, estoy contigo. Nuestros jeans están mojados pero somos felices. No es profundo, pero es muy grande y muy ancho. Comenzamos por unas cosquillas. Me tomas los pies y los cosquilleas con tus dedos. Me encanta eso y me hace reír. Sigues las cosquillas y ahora, estás cosquilleándome en los jeans, lo que me hace aún más reír. Notas que mi sexo está aún más duro. Aún en el jeans, cosquilleas mi sexo y te encanta. Estoy de nuevo en el paraíso.
Sales del agua para ir a buscar la crema batida. No te veo porque estás detrás mío. Regresas al agua, me pones la crema batida en la cabeza, y me haces un shampoo, lo que te hace aún más reír. Me pones la crema batida en los hombros y empiezas a besarme. Me encanta aún más.
Aún con la crema batida, pones una gran cantidad en mis pies, y lames mis plantas. La textura caliente y dulce de la crema me hace sonreír. Tu lengua está cosquilleando mis pies, lo que me encanta aún más. Es otra manera de hacer cosquillas.

Es mi turno ahora. Nado hacia ti, bajo el agua. La crema que pusiste en mi cabeza también se va. Me acerco de ti, y empiezo también con cosquillas. Te ríes mucho porque tus plantas son aún más sensibles. Tu risa es una hermosa melodía para mis orejas y nunca me canso oírla. Luego, huelo tus pies muchas veces. Me encanta el olor de tu piel. No huelen mal porque estamos en el jacuzzi, pero noto que son muy dulces y están arrugadas tus plantas, lo que me encanta. Las beso y empiezo a chuparte los dedos de los pies, lo que te da un orgasmo. Te miro nuevamente y veo que tus ojos están cerrado y que estás disfrutándolo al máximo. Tomo la crema batida y te pongo un poco en la cabeza. Te pones a reír y te gusta mucho. Regreso a tus pies, y pongo una gran cantidad en las plantas y también te las lamo. El olor de tu piel y de la crema me vuelven loco, y quiero más (y tú también). Entonces propongo que nos hagamos cosquillas en nuestros pies al mismo tiempo, lo que acceptas. Sigamos con las cosquillas durante un par de horas, nadamos en el enorme jacuzzi, nos vestimos y salimos.

Al salir, noto que hace tanto calor (unos 40°C) que nuestros jeans mojados ya no lo están. Me preguntas si me gustó la sorpresa. Te respondo que me encantó un montón, y me dices que cuando estemos en casa, me regalarás cosquillas no en los pies sino en el vientre. Y como una promesa es una promesa, es lo que haces. Estoy en tu cama, Me pides que me acueste y me quitas el tee-shirt, y los flips-flops. Te quitas tus wedges y te sientas a mi lado, descalza. Me haces cosquillas con tus dedos y me hace reír muchísimo. Y poco a poco, esas cosquillas se convierten en un handjob, mientras que huelo tus pies de nuevo…

Abres los ojos y ves que tus pies aún están en mis manos. Y para agradecerte por haberme escuchado, te beso las plantas 😀

Espero que te haya gustado esta larga historia y que podamos hacerla realidad cuando nos veamos. Cada vez que veo el vídeo, mi corazón está golpeando en mi pecho (y sigue golpeando) porque me imagino estar contigo en ese jacuzzi.

Quiero nuevamente que sepas que haces un enorme e impresionante trabajo. Todas tus sesiones son excelentes y me ayudan mucho cuando te cuento historias. Es cada vez más un enorme placer estar a tu lado en esta aventura fetichista. Espero que nos veamos un día para que pueda abrazarte de verdad (no olvido las cosquillas). Cuentas mucho para mí, y sinceramente, te adoro. No he encontrado a una persona fetichista de los pies sino una gran persona, muy dulce, muy simpática, que está disfrutando la vida a lo máximo y que no juzga a nadie. Esos valores significan mucho para mí. Acabo de leer esas frases de nuevo, y quiero llorar de alegría.

Te mando millones de besos y cuídate mucho por favor ♥♥